Llevaba toda la mañana de un lado a otro.
Le había llamado su jefe para atender unos asuntos y de ahí se fue a hacer las compras de la casa, no era mucho así que se ue a pie. Miro hacia arriba, las nubes cubrían el cielo. mejor me apresuro antes de que me agarre la tormenta pensó y apresuro el paso.
Al poco tiempo ya se encontraba cerca de casa, vio a alguien parado enfrente de la puerta y no tardo en reconocerle.
-Espero no haberte hecho esperar tanto- le saludo al polaco con una amable sonrisa y abrió la puerta principal. -Entra y sientete comodo.